Concordia pone en juego el título de Capital del Peronismo

La Capital Nacional del Citrus es también la capital provincial del peronismo. Como consecuencia de eso, es la urbe política más destacada, porque de allí son originarios los actuales funcionarios poderosos y también lo fueron en el pasado.

Analicemos: El Gobernador electo dos veces, Gustavo Bordet, es de Concordia; antes fue también dos veces intendente de esa ciudad, al igual que Jorge Pedro Busti (tres veces gobernador y dos veces intendente); en ese lugar también hizo gran parte de su carrera política Sergio Urribarri (dos veces Gobernador, Ministro y Presidente de la Cámara de Diputados); es oriundo el Presidente del Bloque Justicialista, Armando Gay; también es de Concordia el Presidente del STJER, Martín Carbonell (al igual que los Vocales Daniel Carubia, Miguel Giorgio, Juan Smaldone, Bernardo Salduna y el Defensor General Maximiliano Benítez); a dicha ciudad pertenecen el actual Presidente de la Cámara de Diputados de la Provincia, Angel Giano, como la Diputada Nacional Mayda Cresto y el Senador Nacional Edgardo Kueider.

Lo propio acontece con el Presidente de la Comsión Técnica Mixta, Ingeniero Luis Benedetto, el Ministro de Hacienda y Finanzas de Entre Ríos, Hugo Vallay, el secretario de hacienda Gustavo Labriola, el Presidente del ENHOSA, electo intendente dos veces, ex Senador y ex Diputado, y candidato a Diputado Nacional, Enrique Cresto; quien a su vez es nieto de otro Gobernador Peronista, de igual nombre (Don Enrique).

Marcelo Richard ,ministro de planificación; Mario Kaplan, Sidecreer; Guillermo Dubra, Iafas, entre otros.

Ironizaba un empleado del Iosper: “son tan golosos y desesperados por manejar las cajas, que hasta los tres integrantes de la comisión fiscalizadora de la Obra Social son de Concordia: Mario Imaz, (médico) Mariano Giampaolo (abogado) y Alfredo Michelet (contador).

Todos, absolutamente todos ellos ponen en juego el poder territorial que les da sustento de una u otra forma. Se dará en ese terruño, a no dudar, la madre de todas las batallas. El domingo a la noche, la totalidad de las miradas se posarán en lo que pase en Concordia.

El Apellido Cresto jugará una ficha importante, corriendo el riesgo de sacrificar la carrera política (o al menos retrasarla bastante) del mencionado Enrique.

Abriendo el paraguas antes que le lluevan votos en contra, salió a relativizar la elección y a bajarle el precio a la derrota Gustavo Bordet (sólo se tratan de elecciones legislativas, las elecciones en donde se eligen intendentes, gobernadores, etc, “es otra cosa”).

Comparando con la derrota sufrida en las legislativas del 2017, pasando por alto que quien gobernaba la nación en ese momento y con viento de cola era cambiemos ( Macri), y ahora es el pj ( Fernández). Una gran diferencia.

Un militante radical entusiasmado por los números favorables que reflejan las encuestas dijo: «El peronismo se terminará en Concordia. Ya les perdieron el respeto a la casta política de ese partido. Cuando el votante te pierde el respeto, no lo recuperas nunca más”. ¿Les habrá perdido el votante respeto y confianza al peronismo en Concordia?

Otro, pero éste peronista, nos comentó: “Ya les sacaron la ficha a todos. Son una máquina de hacer negocios para ellos”. ¿Será esa la sensación o la percepción del “ciudadano común”?

El domingo se comenzarán a develar éstos misterios.

Pero si miramos fuera de Concordia, por ejemplo, en Paraná, también la imagen es bastante precaria. Un ex intendente y Gobernador peronista, Mario Moine, apoya a Frigerio; Beto Bahl (actual intendente) y José Carlos Halle (ex Intendente) y jefe político de la Ministro Rosario Romero, no fueron ni siquiera al acto de cierre de campaña, ni el mismo gobernador y presidente del PJ, Gustavo Bordet, se hizo presente. “No tuvieron la delicadeza o la cortesía,  de al menos ir a sacarse la foto”, se escuchó decir muy molesto a uno de los organizadores. Julio Solanas no levanta, y Cáceres da la sensación de que sólo no puede.

Sin las dos ciudades más importantes con figuras electoralmente fuertes, ¿tiene tiempo el peronismo de erigirse en una fuerza competitiva para las elecciones del 2023? ¿O están resignados a entregarle el poder a Frigerio, para después hacerle la vida imposible?

“Nunca estuvo tan atomizada y tan divorciada la dirigencia del peronismo con el pueblo. Perdieron nuestros dirigentes la clásica empatía que nos hacía ganar elecciones”, dijo como sentenciando el final un puntero barrial de Concordia, mientras esperaba en un despacho que lo atiendan.