- 6
- Compartidas
A las 18 comenzaron a cerrar las mesas de votación. Los argentinos fueron a las urnas para elegir a su próximo Presidente en el balotaje entre Javier Milei -La Libertad Avanza- y Sergio Massa -Unión por la Patria-. Pese a los temores y advertencias previas sobre posibles irregularidades, la jornada transcurrió sin denuncias de fraude.
A pesar de tratarse de un fin de semana largo, la participación electoral fue similar y hasta podría ser apenas superior a la que se dio en las elecciones generales, cuando votó el 77,6 por ciento del padrón. La máxima afluencia a las urnas se registró en los comicios de 1983 y de 1989, luego del regreso de la democracia, con una presencia superior al 85% del padrón. En los años 90 los porcentajes bajaron, pero hasta el 82%. Luego de la crisis de 2001, el porcentaje perforó el piso del 80%. Se trata del segundo balotaje en democracia. El antecedente es el de 2015, cuando Mauricio Macri derrotó a Daniel Scioli.
En las elecciones generales del 22 de octubre, Massa obtuvo 36,78% y Milei 29,99%.
La decisión del gobierno nacional de no correr el feriado de mañana lunes 20 de noviembre parece no haber erosionado el nivel de participación. De acuerdo a los datos preliminares de la Justicia Electoral, este domingo fueron más personas a las urnas en comparación con la primera vuelta.
Al igual que en las elecciones anteriores, Massa se recluirá en el Complejo C, ubicado en Chacarita, a donde la militancia comenzó a llegar a media tarde. Milei está en el Hotel Libertad, lugar en el que reside hace varias semanas. Allí se espera también a dirigentes del PRO, especialmente a Patricia Bullrich y Mauricio Macri, quienes se pronunciaron públicamente a favor del libertario y fueron determinantes para asegurar la fiscalización en distritos donde la estructura del “León” es escasa.
Tanto Milei como Macri les enviaron audios a los fiscales para que se queden en los colegios hasta que las actas estén cerradas y firmadas.
- 6
- Compartidas