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La semana pasada comieron juntos en Buenos Aires Sergio Urribarri, Antonio Alizegui (Secretario de las 62 Organizaciones Peronistas en Paraná) y Hugo Moyano (titular de la CGT).
Fue esta una reunión en la que no escatimaron las críticas en contra de Jorge Busti. Y quedo claro que en el encuentro que a los tres hombres lo unió la misma pasión: destruir el ex Gobernador.
Mesa chica que luego se agrando cuando se sumaron los representantes de las CGT de Colón, Gualeguay, Concordia, Paraná, Concepción del Uruguay y Gualeguaychú.
Parece que Hugo Moyano no le quiere perdonar a Busti el desaire que le hizo pasar en 2007 cuando, mientras se armaban las listas a Diputados Nacionales, el entonces Mandatario provincial no lo quiso recibir, ya que sabia que el Secretario de Camioneros (que contaba con el aval del kirchnerismo) y otros gremios, querían incluir entre los candidatos del PJ a Antonio Alizegui.
En ese momento, Busti explicó que había comprometido los lugares para Cristina Cremer, Gustavo Zavallo (dos personas muy cercanas a él) y Juan Carlos Cresto, quien en ese entonces era Intendente de Concordia y había jugado por la Lista 100.
Este último nombre fue el motivo por el cual Urribarri puso el grito en el cielo, frenó la inclusión de Cresto (con quien estaba, en ese momento, muy enfrentado) y acordó con Moyano para llevar a Alizegui en tercer lugar de la lista de Busti.
Es más, Urribarri fue el único que se sentó con el Secretario del Gremio de Camioneros, el entonces Gobernador Jorge Busti no lo hizo, tampoco lo atendió ni participó con ellos en el acto.
Este desaire, Moyano, hombre fuerte del sindicalismo y del gobierno de los Kirchner, no lo perdona.
Incluso desde las 62 Organizaciones Peronistas, entienden que el bustismo “jugó para atrás” en las elecciones de manera que sólo entren como Diputados Cremer y Zavallo, dejando afuera a Antonio Alizegui que iba en tercer lugar.
En la mesa chica hubo durezas con Jorge Busti. En la segunda, la más grande, luego de que ingresaran los representantes de las seccionales entrerrianas, ya no se habló de Busti pero si le reclamaron a Urribarri los cargos –o espacios de poder- que se habían comprometido al inicio de la actual gestión. Algo que el Gobernador se comprometió a corregir muy pronto.