Aunque Molina no quería saber nada con otro cargo que no sea Enersa, donde tendría toda su estructura armada, se tendría que conformar con el Ministerio de la Producción.
Molina es acusado duramente de ser responsable del cierre de los talleres ferroviarios, que hace unos años atrás una empresa recuperó para la reparación de coches Fiat. Esto resulta sorpresivamente paradójico, ya que Molina, hoy está encargado del organismo que pretende recuperar los ferrocarriles en la provincia. Se comenta que sería para hacerle una gauchada a Ricardo Jaime, Secretario de Transporte de la Nación, y ocultar que con una ínfima suma, comparada con lo que se paga por lo que se trae del exterior, se logró recuperar material, que fue puesto a prueba recientemente con un viaje entre Buenos Aires y Misiones.
Además, existirían sospechas sobre las obras que está realizando una importante empresa constructora en el proyecto de reactivación ferroviaria.
Más allá de que Molina es número puesto para asumir en el mes de diciembre como ministro de la Producción, por encima del Cr. Roberto Schunk, siempre aspiró a quedarse con la conducción de Enersa, donde tendría toda su estructura armada, pero parece que Urribarri en esa área que conduce el Ing. Arroyo, no quiere hacer cambios, y Molina por lo tanto, según dicen allegados, debería conformarse con el área de producción.
Desde el sector de Molina, no ven esto con buenos ojos, porque consideran que son la agrupación política más importante de Paraná, y quieren cobrar como tales.
Mucho se habla, inclusive internamente de esta agrupación, de que todavía no han cerrado con ninguno de los dos que se van a disputar el 2011 -Urribarri y Busti-, es más, algunos sostienen que mientras el primero no les muestre la punta de la sota, no le van a dar pelota.
Fuerte es la presión que estaría recibiendo el matrimonio de Blanca Osuna y Carlos Molina por parte de muchos de sus seguidores que aspiran a varias áreas importantes del gobierno, que si no arreglan bien con Urribarri, se provocaría el desbande.
Como dijera un filósofo, la vida nos da cuanto queremos si podemos pagar el precio.
