Se viene el todos contra todos.
No estando Busti al frente, salvo sus tres leales, los demás integrantes Berthet, Jourdán, Allende, Cáceres, Vázquez, Zacarías, Jodor, etc, van a sacar pecho.
Gran encrucijada para el actual presidente de la Cámara de Diputados que aspira a volver a sentarse en el sillón de gobernador en 2011, más allá del gustazo que se dio con la reunión que mantuvo con Kirchner a través de Guastavino y de hacerlo caminar por las paredes a Urribarri, algo que pareciera que en los últimos tiempos es una de las grandes satisfacciones que le puede dar la política.
Es más, según comentan los mentideros, después de enterarse de esta reunión, Urribarri lo llamó a Guastavino y lo insultó de arriba a abajo, porque lo consideró un acto de traición.
La consigna de la reunión en Olivos fue la candidatura de Busti a la diputación nacional, pero que esta se de en forma natural, evitando choques con las huestes del gobernador, y en base a esto se estaría operando.
El gran desafío electoral en momentos difíciles no solamente es lo que estaría generando dudas en Busti, sino todo lo que encierra el dejar la provincia para irse a la Nación y desprenderse de una herramienta política poderosísima como es la conducción de la Cámara de Diputados de la provincia.
Una Cámara que va a renovar sus autoridades en junio del año que viene, unos meses antes de que Busti, si se presenta y es electo, asuma como diputado nacional.
Seguramente en esa renovación en junio con este nuevo escenario adquiere vital importancia la figura del vice presidente primero, que es el que reemplazaría a Jorge Busti en la conducción.
Un Busti que cuenta para esta maniobra a tres diputados leales, Kerz, Bolzán y Haydar, aunque confía ciegamente en los dos primeros; pero ni los Berthet, ni los Jourdán, ni los Allende, ni los Cáceres, Jodor, Vázquez, Zacarías, por nombrar algunos de ellos, seguramente no aceptarán esta imposición y van a dar pelea, porque cada uno de ellos, no estando Busti consideran que tienen el lomo necesario para conducir la misma.
Berthet habiendo conducido los destinos del bloque del Senado durante tres años sería ilógico que vaya detrás de Kerz.
Jourdán ya lo intentó al principio conformando el grupo San José y sólo lo hizo declinar la presencia de Busti.
Allende, siempre fue para él el sueño del pibe.
Cáceres se siente el sucesor natural de Busti, así como lo fue en el partido, también lo quiere ser en la Cámara de Diputados.
Seguramente ninguno de estos va a querer desprenderse de esta herramienta política institucional importantísima para el futuro político de su sector, anunciando que se viene una pelea de todos contra todos y que Diputados, si se va Busti, pasaría a ser la segunda Yugoslavia.
Algo que estaría haciendo meditar y dudar al ex gobernador de cumplir con una palabra medio empeñada.
Un filósofo decía, las circunstancias no forman a los hombres, los muestran.
