“No perseguimos a los inspectores de Tránsito, lo que hacemos es controlar que cumplan con sus tareas”, sentenció Sergio Ardison.

“No hacemos diferencias con la asignación de módulos productivos, el empleado que trabaja más cobra más, pero hay gente que no quiere trabajar”, dijo el sub director de Tránsito de la Municipalidad de Paraná.

“De 140 inspectores son sólo 12 los que están en disconformidad con nuestra dirección. Nos enteramos por los medios que se sienten perseguidos”.

“No perseguimos a nuestros empleados, lo que hacemos es controlarlos como lo haría cualquier ejecutivo. Estamos todo el día en la calle, es nuestra obligación estar con el conjunto de inspectores de tránsito”.

“No hacemos diferencias con la asignación de los módulos productivos, el empleado que trabaja los cobra. Hay inspectores que entran hoy a las 15 y salen mañana a las 6. Hay personas que no quieren trabajar. Hemos ido a comprobar que estuvieran prestando servicios y no estaban presentes en los lugares designados”.

“Con Mario Sosa, que es el director, estamos todos los días desde las 6 de la mañana hasta las 22 y los fines de semana trabajamos toda la noche a la par de los inspectores. Es la primera vez que los directivos del área trabajan así”.

“Los trabajadores tienen todo el derecho de reclamar. Nosotros estamos tranquilos porque sabemos que hemos hecho las cosas bien. El Ejecutivo ha felicitado a todo el cuerpo de inspectores por el trabajo que hacemos a diario. Halle y Romero están evaluando este conflicto. El intendente nos ha solicitado a los que estamos a cargo de la Dirección que trabajemos a fondo y eso es lo que hacemos”.

“El director les manifestó a los jerarquizados y a los inspectores que avisen con tiempo si tienen que cambiar de turno un fin de semana. Esta gente no avisa, y nosotros les descontamos las horas como lo haría cualquier empresa privada”.

“Me consta que no le notificaron a Hugo Vázquez ni a Ramón Leal acerca de la asamblea, y si lo hubieran hecho habríamos podido resolver las cosas en menos tiempo”.

“Los diferentes barrios necesitan la presencia de los inspectores. En Gazzano se está trabajando conjuntamente con Limpieza, Obras Sanitarias y Comisiones Vecinales”.

“La zona más complicada es la zona céntrica, porque el conductor quiere estacionar en el lugar al que va y por eso destinamos la mayor parte de los trabajadores. También asignamos personal a los cruces de las escuelas, pero desde el lunes los inspectores no se presentan y ponen en peligro a los chicos”.

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