¿Vázquez moviliza en contra de Halle o de Osuna?
Trascendió hace unos días que, a través de una alta autoridad partidaria y funcionario provincial, Vázquez habría estado muy cerca de sellar un acuerdo con el gobernador de la provincia.
De los 1800 empleados municipales que cuentan con contratos de obras, más de mil se encuentran a las puertas de la municipalidad, con camiones y bombas, protestando para que no se produzcan despidos.
Estos empleados cuentan con contratos que oscilan entre los 2200 y 2500 pesos, y no se encuentran en planta, y que a fin de mes le quedaba una cifra muy jugosa a las autoridades del poderoso Suoyem, que algunos estiman superior a los 300.000 pesos.
La duda es si el interés es defender la estabilidad de los trabajadores o el aporte que le quedaba en cash a las autoridades del poderoso gremio municipal.
Tal como Vázquez había amenazado tras las elecciones, y como habíamos anticipado en este portal, organizó a sus tropas del poderoso gremio del Suoyem, produciendo caos no sólo en la calle, sino también en el interior del edificio municipal.
Lo que no está claro es si la movida de Vázquez es contra Halle, contra Osuna, o contra ambos.
Aunque otros sostienen que Vázquez hace estallar este reclamo ahora como una búsqueda de soluciones para los empleados, para no dejar ver el trasfondo político de esta movilización, que se va a extender en el tiempo, inclusive cuando asuma Blanca Osuna.
Hace unos días, trascendió en algunas primeras líneas que, a través de una alta autoridad partidaria y funcionario provincial, Vázquez habría intentado sellar un acuerdo con el gobernador de la provincia.
Más allá de que no trascendió si esa reunión se llevó a cabo y se dio el acuerdo, llama poderosamente la atención que hoy el principal socio de Halle se esté manifestando ruidosamente en la puerta del Municipio, aunque a éste la situación no lo afecta notablemente, ya que su mandato llega a su fin.
Por otra parte, no se descarta que Sergio Urribarri le haya cerrado las puertas al gremialista (aunque otros dicen todo lo contrario), por lo que éste tomó la decisión de cargar contra Osuna, ya que esta movilización recién comienza, y la intendenta electa se encontrará con esta situación cuando asuma su mandato.
Antes del 23 de octubre, los mentideros afirmaban que Urribarri pretendía enrolar a Vázquez entre sus hombres, ya que era el principal socio de Halle y Busti en Paraná. Al no darse esa situación y con la victoria en la ciudad ya consumada, el gobernador no iría en busca de Suoyem, sino de la cabeza de quién está al frente de ese gremio.
Las piezas están dispuestas sobre el tablero, la pregunta a quién responden y contra quién cargarán. La Plaza de Mayo de Paraná vuelve a convertirse en el epicentro de una nueva guerra entre el gremio municipal y las autoridades municipales.
En definitiva, como dijera un filósofo: «la vida es un chiste».