Vacío y bronca
Según comentan los mentideros, los ministros Bahl y Cáceres lo convocaron antes del acto del viernes pasado y Erro les cortó el teléfono.
La pasada noche de viernes, el intendente de Gualeguay, Luis Erro, lanzó su reelección a la intendencia.
A pesar de los anuncios realizados por el presidente municipal de que iban a estar presentes importantes funcionarios nacionales (es conocida la amistad de Erro con el ministro Aníbal Fernández), esto no fue así y no se contó con la participación de ninguno de ellos.
El vacío realizado por la nación a Erro también fue imitado por la provincia, ya que no asistió ninguno de sus funcionarios.
De los intendentes el único que se hizo presente, siendo que Erro es integrante de la liga, fue Joselo Nogueira de La Paz a pesar de ser advertido de que no concurra.
Lo que es más, se comenta que el día del acto los ministros Adán Bahl y José Cáceres, este último compañero de fórmula de Urribarri, se comunicaron telefónicamente con Erro para que desista de su lanzamiento.
Lo que trataban era de evitar las internas desangrantes del PJ en un departamento clave como es Gualeguay.
Ya antes Urribarri había evitado la interna en varios lugares estratégicos del armado provincial, como ser en Nogoyá entre dos pesos pesados como el intendente Schiavoni y el diputado José Allende.
En Diamante entre el intendente Juan Carlos Darrichón y Daniel Kramer de Ramírez ya que este último exigía la diputación, y en Chajarí (Federación) con el intendente Juan Javier García.
El caso más emblemático fue el de la ciudad de Paraná donde hizo declinar las aspiraciones de Solanas, Bahl, Ruberto y Centurión para tener como candidata única a la intendencia a Blanca Osuna de Molina.
Lo real es que fueron infructuosos los llamados y la convocatoria de Bahl y Cáceres para que el intendente de Gualeguay se hiciera presente en Paraná, es más no sólo que no vino sino que también les cortó el teléfono.
Con esto además de generar un vacío provocó la bronca de las principales espadas de Urribarri.
Un Erro que a pesar de las advertencias no quiere dar el brazo a torcer más allá de las insistencias de Urribarri de evitar las internas en un departamento comprometido como Gualeguay.
