Escandalo en el Concejo Deliberante de Paraná
«El conductor soy yo» le gritaba el ministro a la concejala, que en medio de un ataque de nervios no quería ceder a la presión.
Mañana asumirían las nuevas autoridades en la última sesión del año, que iba a ser el viernes pasado pero se prorrogó para este miércoles 5 de diciembre.
En la sesión del viernes, uno de los nombres que más fuerte sonaba para la presidencia del bloque oficialista era el de la bahlista Natalia Osuna de Lagorio, junto al referente de La Cámpora, Juan Manuel Huss, y el de la intendenta, Gabriel Pacífico.
Las concejales Verónica Martínez y Natalia Osuna de Lagorio, pertenecen a la agrupación “Convicción Peronista”, que dirige el Ministro de Gobierno de la Provincia, y habrían llegado al Concejo Deliberante gracias a un acuerdo entre Adán Bahl y la intendenta Blanca Osuna.
Pero, en plena mañana del viernes se dieron cambios inesperados: Verónica Martínez resultó ser la vice presidenta primera del Concejo; Gustavo Guzmán mantuvo la presidencia dentro del bloque oficialista; y la concejal de la UCR, Adriana Torner, se quedó con la vice presidencia segunda.
Parece que Martínez, antes de la sesión del viernes, se reunió Guzmán y con el presidente del Concejo Deliberante, Gastón Grand, y se cambió de bando.
La concejal habría acordado votar a favor del solanista Guzmán, y de este modo habría conseguido, entre otros beneficios, que la nombren vice presidenta primera del Concejo, remplazando a Cristina Sosa.
Este gesto enojo muchísimo al ministro Bahl, quien esta mañana habría llamado por teléfono a Martínez para exigirle que renuncie a la vice presidencia primera para ser remplazada por Natalia Osuna de Lagorio.
Los mentideros aseguran que el ministro le echó en cara a Martínez que ella llegó al Concejo Deliberante por pertenecer a su agrupación “Convicción Peronista”.
Se comenta que el ministro le gritaba a la concejal «¡el conductor soy yo y vas a renunciar!» y que además le decía «agachá la cabeza y obedecé».
Esto generó un alboroto y en los pasillos dicen que la concejal entró en un ataque de nervios luego de hablar con Bahl.
Según se dice, el marido de Martínez estaba a su lado y trataba de consolarla y habría ayudado a su mujer con las respuestas más convenientes para darle al ministro.
Ahora no se sabe si Verónica Martínez responderá al pedido del ministro y renunciará a la vice presidencia primera, pero dicen los mentideros que el bahlismo dentro del Concejo quedó fuertemente dividido y que la relación entre Natalia Osuna y Martínez quedó destruida.
Sólo queda esperar hasta mañana para ver qué pasa con este nuevo escándalo en el Honorable Concejo Deliberante de Paraná.
