Se viene el juego online en la provincia: máximas autoridades del IAFAS viajan a Colombia para recibir instrucciones sobre el sistema de Mautone y Gianfranco Macri.

Corrupción estructural

El empresario del juego, con un enorme poder de influencia en Entre Ríos y muy generoso en la campaña proselitista, movió los hilos para que le aprueben un negocio millonario, el de las apuestas por internet, que genera exorbitantes ganancias que van al bolsillo de unos pocos.

Las máximas autoridades del Instituto de Ayuda Financiera a la Acción Social (IAFAS) viajarán fuera de agenda esta semana a Colombia con el fin de instruirse acerca de una empresa dedicada al juego online.

La compañía pertenecería al empresario del juego victoriense Daniel Mautone, que por una parte mantiene una excelente relación con el gobierno provincial y por otra está asociado con el hermano del presidente de la Nación, Gianfranco Macri, con quien gestiona el emprendimiento que tiene su sede física en el país cafetero.

El arreglo para implementar el juego online en Entre Ríos, que debe hacerse mediante una ley aprobada en la Legislatura, llegaría a través de Mautone, que además de ser dueño del Casino Victoria, tiene una fuerte relación con el poder político provincial.

Si los casinos y todos los excesos que se sabe que se generan dentro de ellos producen ganancias millonarias para los empresarios, más significativos aún son los dividendos del juego online, ya que no tiene costos de personal, mantenimiento del local y demás.

Sin embargo, según los expertos, el juego online puede traer serios problemas de ludopatía. Los factores son varios: la inmediatez de la recompensa, la velocidad de las apuestas, el fácil acceso, la intimidad y el volumen de las publicidades.

De acuerdo con un estudio realizado en Madrid, antes de su legalización el 2,5% de las personas tratadas por casos de ludopatía aseguraba realizar apuestas online. Pero en tres años, a partir de la legalización, ese porcentaje se disparó al 24%.

En España, la problemática afecta principalmente a los jóvenes y a los sectores más vulnerables económicamente de la población. Este fenómeno se replica alrededor del mundo y la Argentina no es la excepción.

El año pasado, la gobernadora de Buenos Aires, María Eugenia Vidal, puso en agenda el tema de la regularización del juego online, ya que lo contemplaba en el paquete de leyes que conformaban el presupuesto 2019.

Además, la mandataria clausuró algunos bingos y casinos que no cumplían con las normativas provinciales y se manifestó en contra de su instalación en los barrios más carenciados del conurbano bonaerense, ya que los más proclives a caer en la adicción son justamente los sectores más necesitados.

Fue con la intención de hacer frente a esa problemática que Vidal propuso la implementación y control del juego online, que actualmente existe pero sin regulación en el país.

Ahora la provincia de Entre Ríos regularía esta tipología de juego y el acuerdo sería a través del empresario Daniel Mautone, que junto a Gianfranco Macri, hermano del presidente, posee en Colombia una empresa que se dedica a la explotación del juego a través de Internet.

Con el fin de recibir instrucciones acerca del sistema que utiliza esa compañía y todos los pormenores de su uso, una comitiva compuesta por funcionarios y autoridades del IAFAS viajará esta semana a ese país.

El juego online reduce los gastos fijos de los empresarios prácticamente a cero, por lo que significa ganancias millonarias para los privados. Además, podría generar el cierre de bingos y casinos, debido a la gran rentabilidad que tiene para los empresarios.

De todos modos, el fácil acceso, la posibilidad de la intimidad, la recompensa inmediata y la velocidad de las apuestas hacen a esta modalidad de juego muy atractiva y, justamente por eso, genera fácilmente adicciones, que afectan principalmente a los sectores más vulnerables de la población.

Más allá de eso, con el viaje a Colombia de los funcionarios del IAFAS, se inicia en Entre Ríos el proceso hacia la implementación del juego online, con lo que los mentideros de la institución comentaban que “por la plata baila el mono”.

El acuerdo llegaría a través de Mautone, que es reconocido por ser un empresario del juego muy generoso, principalmente en épocas de campaña electoral.