Larga espera
Históricos dirigentes políticos fueron demorados en la localidad cordobesa de Arroyito hasta que les bajara el nivel de alcohol.
Algunos dirigentes de la oposición no pierden tiempo y buscan cualquier escenario para mostrarse.
Alfredo De Ángeli se puso de acuerdo con Luis Leissa y juntos caminaron en la marcha hacia el puente internacional que une Gualeguaychú con Fray Bentos para reclamar en contra de Botnia.
Parece que en esa foto no había lugar para el tercero en discordia, que ni lento ni perezoso se fue a festejar el día del trabajador a Córdoba, según comentaban algunos operadores cercanos al ruralista, que agregaban que no era el único que había elegido la provincia mediterránea para los festejos del 1º de mayo.
Allí se juntaban De la Sota, Lavagna, De Narvaez y el nuevo rubio que enamora a la clase media argentina, Hugo Moyano, según lo que dejan deslizar demás integrantes de la CGT.
Según comentarios de algunos altos funcionarios provinciales que viajaron por las rutas cordobesas, los controles por aquellos lados son muchos y muy estrictos. Sin embargo, no dejaron de sorprenderse al llegar a la localidad de Arroyito
Gran asombro les causó cuando, luego de dejar el control de alcoholemia que realizaba la policía, vieron a un costado al ex gobernador y al correntino Victor Priggioni a la vera de la ruta.
Parece que el ex primer mandatario y ex líder indiscutido del peronismo entrerriano tenia varios motivos para festejar, y cuando festejan, lo hacen en serio.
Festejaron tanto por adelantado que fueron detenidos por horas hasta que el dopaje etílico en sangre se diluyó lo suficiente como para que el control de alcoholemia que le había efectuado la policía cordobesa bajara a niveles que le permitieran seguir viaje.
