Conclave del Massismo en la Esso.
El lugar que se ha trasformado en promotora del massismo, mostró idas, vueltas y echadas en cara.
Esta mañana se pudo ver a los máximos referentes del massismo en la provincia acercarse a la céntrica estación de servicio de Paraná, ubicada en calle Buenos Aires y Cervantes, en donde se iba a mantener una reunión estrictamente política.
Así fueron llegando Eduardo Caporale, Daniel Luján, “Chino” Ríos, y el ex gobernador, Jorge Busti, acompañado por el conocido “correntino” Prigioni, quienes se fueron instalando en una de las mesas, para arrancar lo que desde afuera, según lo que pudieron presenciar los presentes, parecía un notable cónclave.
A varios llamó la atención la presencia de Luján y Caporale, debido a que recientemente habían dicho que eran “ex bustistas” y se lo habían planteado a Sergio Massa en una reunión, para convertirse en referentes de ese sector en la provincia.
Lo que también se pudo observar, fue que en un momento entró el ex presidente de Patronato, Osvaldo Tarzia, quien al ver el cónclave no pudo contener su malestar, y muy molesto se dirigió hacia una mesa aparte.
Busti, al ver que estaba ese dirigente, se levantó de su silla y fue a saludarlo, invitándolo a que los acompañara, pero el crispado Tarzia se negó rotundamente.
Es más, comentan que en un momento Tarzia no aguantó más y, agitando su dedo en actitud amenazante, repetía sin parar “yo también soy representante de Massa en Entre Ríos, y ahora voy a viajar a Buenos Aires y voy anunciarlo en una conferencia de prensa, como hacen todos para vender el paquete”, ya que al parecer, vio el negocio de seguir los pasos de Caporale y Lujan y cortarse solo para poder sentarse de igual a igual con el intendente de Tigre.
Frente a tal enojo, se pudo ver a un “Correntino” mediador, quien trataba de contener a Tarzia diciéndole “está bien, tenés razón, tranquilízate Osvaldo”, a lo que éste contestaba “yo soy leal, nunca lo negué a Busti”, dirigiéndose tanto a Caporale como a Lujan.
Mientras, desde su lugar Tarzia irradiaba bronca y observaba como en la otra mesa se organizaba el desembarco de Massa en la provincia. Tal era el enojo del dirigente que los playeros estaban muy preocupados ya que de la calentura que llevaba Tarzia temían que explotaran todos los expendedores de combustible de la estación, lugar que tras este cónclave se ha trasformado en la promotora del Frente Renovador.
