Aún cuando su nombre despierte alguna resistencia es la figura que logra mayor consenso. Significaría una derrota para Bordet, porque no pudo sostener a su delfín, Martín Carbonell, quien le aseguraba otro período sin ningún inconveniente con ese Poder del Estado.
Para el próximo jueves 25 a las 9 de la mañana está prevista la reunión de un Acuerdo especial del Superior Tribunal de Justicia en pleno para elegir las autoridades del Alto Cuerpo para el bienio 2021/2023.
Se da por descontado que la elección de la presidencia del máximo órgano judicial de la Provincia ha de recaer en la actual Vocal de la Sala Laboral Dra. Susana Medina de Rizzo; aún cuando su nombre despierte alguna resistencia es la figura que logra mayor consenso.
Significaría una derrota para Bordet, porque no pudo sostener a su delfín, Martín Carbonell, quien le aseguraba otro período sin ningún inconveniente con ese Poder del Estado.
Medina de Rizzo tiene una buena relación con Rosario Romero. Es otra mujer más, la tercera, que asumirá la máxima investidura de conducción (antes lo hicieron Leonor Pañeda, jubilada, y Claudia Mizawak).
Además sus pares valoran el desempeño de la Dra. Medina en el Instituto de capacitación Juan Bautista Alberdi, así como en «la justicia va a los barrios» y su participación en la asociación de Mujeres Juezas a nivel nacional e internacional.
Varios de los actuales vocales le habrían prometido el cargo a la Dra. Medina como sucesora de Castrillón, lo que fue incumplido con la interferencia de Bordet, quien forzó el arribo de Carbonell.
Subsisten dudas respecto al vicepresidente, unos se inclinan por repetir el mandato del Dr. Germán Carlomagno, otros propondrian a Miguel Giorgio.
Eso es lo que se vislumbra hasta hoy, salvo que, a último momento, como dicen en el campo «el diablo meta la cola».