El PRO y el radicalismo ofrecen tranformar las PASO en voluntarias, en vez de derogarlas. Bajar la edad de imputabilidad y derogar la jubilación de privilegio son otros de los temas que se charlarán este jueves.
El jefe de Gabinete, Guillermo Francos, visitará este jueves a la Cámara de Diputados para reunirse con los presidentes de los bloques de la oposición. Participará también el presidente del cuerpo, Martín Menem. El encuentro está programado para las 16 en las dependencias de la presidencia de la Cámara.
Estarán presentes Rodrigo de Loredo, por el radicalismo, Cristian Ritondo, por el PRO, Miguel Pichetto, por Hacemos Coalición Federal, Juan Manuel López, por la Coalición Cívica, y aún no se ha confirmado la participación de un representante de los partidos provinciales nucleados en Innovación Federal.
Como ocurrió en los debates de la Ley Bases y de Medidas Fiscales, Unión por la Patria y el Frente de Izquierda no están siendo considerados por el momento. De parte de los libertarios estará presente Gabriel Bornoroni.
En su agenda de temas, Francos lleva la propuesta del Ejecutivo de eliminación de las PASO (primarias abiertas, simultáneas y obligatorias), instauradas por el Congreso en 2009 durante la presidencia de Cristina Kirchner y con la articulación del exministro del Interior, Florencio Randazzo, hoy diputado nacional en el bloque presidido por Pichetto.
”Escucharemos la propuesta y el contenido del debate que está planteando el Gobierno”, dijo Pichetto el pasado lunes, acompañado por el diputado Óscar Agost Carreño, tras reunirse con Martín Menem. Esta semana, con la intención de señalar al oficialismo que ya existe una agenda de temas a discutir, el titular del Pro, Cristian Ritondo, entregó una nota formal a Francos y a Menem detallando sus iniciativas. Entre ellas se encuentra una Reforma Electoral que incluye proyectos como la boleta única, ficha limpia, y la eliminación de la obligatoriedad de las primarias (PASO), además del financiamiento de los partidos políticos y el voto de los argentinos en el exterior. También se incluyen temas como la contratación de publicidad en campaña, la observación electoral y la modificación de las elecciones partidarias internas.
Ritondo también agregó en su nota iniciativa sobre la baja en la edad de imputabilidad, la declaración de la Educación como servicio esencial, el registro de reincidencias y reiterancia, proyectos sobre legítima defensa, extinción de dominio, una agencia de seguridad anti narcotráfico, derogación de jubilaciones de privilegio, entre otros.
El PRO preparó varios proyectos que queire consensuar. “Nuestro bloque ha trabajado arduamente para impulsar las transformaciones que el país necesita, aportando su conocimiento y experiencia en diversas áreas de gestión”, señala el comunicado firmado por Ritondo y Silvana Giudici.
El radicalismo también estará presente en el encuentro para escuchar las propuestas del Ejecutivo. Rodrigo de Loredo y otros diputados de la UCR dejarán claro que están dispuestos a debatir una modificación de las PASO, pero no su derogación. Coinciden con el PRO en apoyar que las primarias sean optativas y no obligatorias como lo son actualmente.
Los diputados socialistas Mónica Fein, Esteban Paulon y Margarita Stolbizer están a favor de mantener las PASO, rechazando su derogación pero aceptando algunas modificaciones. Además, hay un proyecto en el Senado para implementar la Boleta Única de papel (BUP) en las próximas elecciones, sancionado por Diputados y con dictámenes de comisión en la Cámara alta. Los diputados solicitarán al jefe de Gabinete que impulse su sanción, para lo cual será crucial el trabajo de la vicepresidenta y titular del Senado, Victoria Villarruel, quien necesita reunir 37 senadores que apoyen el proyecto.
En 2022, la entonces oposición al kirchnerismo sancionó en Diputados la BUP, basada en el modelo utilizado en la provincia de Córdoba. Esta boleta electoral presenta a los diferentes candidatos para los distintos cargos y permite al elector marcar su elección individualmente o elegir una lista completa. No incluye una opción de voto en blanco, pero si el votante no marca ninguna opción, se considera de esta manera. Las boletas son impresas por el Estado y no se destinan fondos a los partidos políticos para este fin.