El sector de Romero intenta fuertemente tapar la situación, pero a Aizicovich no le han visto la cara y el subsecretario de Justicia permanece en el cargo.
En junio de este año, este Portal publicó acerca de la renuncia de la directora del Registro Civil de la Provincia, Victoria Aizicovich, algo que nunca fue confirmado oficialmente.
Sin embargo, y a pesar de las fuertes desmentidas que llegan desde el sector de la ministra de Gobierno, Rosario Romero, los empleados del organismo no le vieron más la cara a la funcionaria.
Es más, al cargo lo ocupa por el momento el subsecretario de Justicia de la provincia, Fabricio Battauz.
En una primera instancia, desde el sector de Romero y del oficialismo provincial, se buscó imponer la versión de que la funcionaria se alejaba unos días del cargo por motivos de salud.
De todos modos, a más de dos meses, los trabajadores aseguran que Aizicovich no apareció en ningún momento por el Registro Civil.
Es más, el hecho de que en el cargo quedara el subsecretario de Justicia y no alguien del propio Registro, confirma que la funcionaria renunció.
El hecho significa un duro golpe para el sector de la ministra Romero, al que responde Aizicovich, y también para el gobernador Gustavo Bordet, ya que deja en claro que en la administración pública provincial hay una profunda crisis y que la situación en general es muy caótica.
La renuncia de la directora del Registro Civil es un duro golpe para Bordet y Romero
Si bien al no confirmarse oficialmente la renuncia de Aizicovich, tampoco se afirmaron los motivos que la llevaron a tomar la decisión, una de las razones que se comenta es justamente el gran caos que se vive en la administración pública.
Los trabajadores suelen manifestar su descontento con las autoridades provinciales y la toma de decisiones.
La ley de Emergencia sancionada el año pasado y los magros aumentos salariales, que dejan a muchos por debajo de la línea de pobreza, son los principales motivos de enojos, agravados por las designaciones y los suculentos sueldos de los altos funcionarios.
En medio de esa crisis institucional y administrativa, renunció nada más ni nada menos que la directora del Registro Civil, un área vital para la ciudadanía y que cobra particular relevancia en un año electoral.
Entre los motivos de la renuncia también se comenta que la fuerte injerencia de la ministra en la toma de decisiones y a la hora de hacer designaciones fue una de las principales razones por las que la funcionaria decidió alejarse del cargo.
Sin embargo, la renuncia no fue aceptada, por lo que se encuentra con licencia médica, aunque en el cargo está el subsecretario de Justicia.
El el Registro Civil se comenta que la renuncia no ha sido aceptada para no despertar una fuerte disputa por quién pasará a ocupar el cargo.
Es más, aseguran que la situación para los trabajadores es cada vez peor, debido a la gran desidia que se vive, y que el manejo de la pandemia en el organismo fue caótico.
Aseguran los trabajadores que eran obligados a ir a trabajar a pesar de no contar con los elementos de prevención adecuados, lo que causó muchos contagios, algunos casos graves y hasta hubo muertes, a pesar de lo cual las autoridades no gestionaron que los empleados fueran vacunados.
A eso se suman las quejas que llegan desde las oficinas del interior, en donde los vecinos aseguran que solicitan turnos pero no obtienen respuestas y no pueden realizar los trámites que necesitan, lo que deja en claro el caos que se vive.
Por ello fue que tanto el gobernador como la ministra Romero buscaron, primero, tapar el hecho, y cuando este trascendió, desmentirlo.
Pero, a pesar de las desmentidas, los empleados aseguran que no le han visto la cara a la funcionaria en más de dos meses.
Además, en el cargo sigue el subsecretario de Justicia, lo que confirma la renuncia.