En Paraná se impone el PJ
El PJ con un poco más del 40%, muy pobre lo de Alfonsín que pelea con Binner el segundo lugar con un 14%, y el otro pelotón, Rodríguez Saá, Duhalde y Carrió no llegan al 9%.
Más allá de que un gran porcentaje de la población no sabe bien que se vota este domingo, el 75% concurriría a las elecciones primarias de este 14 de agosto.
Los que no le dieron importancia a estas elecciones se equivocaron y seguramente van a pagar muy caro este error estratégico.
Algunas boletas, con sus respectivos candidatos, van a estar en el lugar de votación, mientras que otros tomaron la decisión de no presentarse no llamando a internas en su partido.
Esto se da cuando, estos últimos, históricamente sostuvieron que para legitimar los candidatos había que tener internas y sino aparecían rivales había que inventarlos.
Ahora, probablemente se encuentran en una encrucijada ya que el lunes varios de los candidatos con pretensiones no van a tener un voto en su haber, faltando 60 días para las elecciones.
Seguramente tendrán que remar con la no fácil tarea de revertir los votos que ya fueron destinados a sus adversarios.
Una elección que, según muestran los números de la encuesta realizada por la consultora Mesopotamika, es muy cómoda para el PJ que cuenta con un 43% de intención de votos, en donde, llamativamente, Urribarri se ha convertido en el principal traccionador de votos, siendo que hasta hace poco este rol lo cumplía Cristina Fernández (algo similar estaría ocurriendo en Concordia, aunque la diferencia allí por el PJ son tremendamente más grandes)
Muy pobre la intención de voto para Alfonsín y Fraga (UCR) en la ciudad de Paraná, que si bien en la provincia suben un poco están peleando el segundo lugar con Binner, con un 14% cada uno.
Luego sigue un pelotón parejo con Rodríguez Saá, Duhalde y Carrió, que no superan el 9%, disputándose el cuarto lugar.
Más allá del lógico margen de error de la encuesta, de un 4 o 5%, debido a los cortes de boleta o que un candidato arrastre más que el otro, esto pesaría al momento de votar.
Aunque el triunfo de Cristina Fernández de Kirchner, al ser por una diferencia muy grande, ya es prácticamente inamovible.
Seguramente la estrategia y el discurso del día después será acorde a los resultados: los que ganaron, los que perdieron, y más aún los que no participaron.
En definitiva, como dijera un filósofo, “quien a buen árbol se arrima, buena sombra le cobija”.
