Una gran contradicción, el presidente de un organismo hizo jubilar a una empleada con la excusa de que estaba pasada de edad para poner a uno de los suyos, más grande aún.
Es conocido en la provincia de Entre Ríos que la reforma del sistema previsional que el gobernador Gustavo Bordet no se animó a hacer por vías legales, se está llevando delante de hecho.
En este año, con la excusa de la pandemia, nadie pudo acogerse al sistema previsional, ya que los trámites no podían realizarse de manera presencial y el sistema para acceder online a los expedientes no funcionaba.
Sin embargo, hubo unos pocos privilegiados que sí pudieron acogerse al sistema previsional provincial, a pesar de la reforma encubierta del gobernador, que son quienes cuentan con el beneficio de acuerdos políticos.
Uno de esos casos se dio en una empleada del Iosper, a quien el titular del organismo, Fernando Cañete, “la jubiló” para poder poner en el cargo a un puntero suyo.
Se trata de Nancy Asselborn, que trabajaba como directora de empleados y el 24 de diciembre fue dada de alta en el sistema previsional, por intermediación de Cañete ante la Caja de Jubilaciones.
Es que el titular del Iosper buscaba poner en ese cargo a una persona de su confianza, para poder tener el total manejo de todo lo que se hace con los empleados.
Por eso, habría intercedido para que Asselborn, de 58 años, pudiera acceder a la jubilación, a pesar de que la Caja actualmente no otorga el beneficio a nadie.
En el instituto de obra social, con la edad que tiene esta trabajadora, las mujeres ya pueden jubilarse, por lo que Cañete se apuró para acelerarle el trámite y así poder poner a un hombre suyo en el cargo.
Sin embargo, lo llamativo es que a la mujer la jubilaron con la excusa de que ya está entrada en edad, pero quien será su reemplazo es mucho mayor y también cuenta con la edad necesaria para acogerse al sistema previsional.
El reemplazante sería Darío Pross, que estaría próximo a cumplir los 65 años, es decir que está pasado en tres años de los 62 necesarios para jubilarse del Iosper.
De todos modos, Pross, a diferencia de Asselborn, responde directamente a Cañete, por lo que el titular del organismo hizo las tratativas necesarias para que la mujer se jubilara y así poder poner a alguien de su confianza en la sensible área encargada de los empleados.
Una vez más, la deficitaria Caja de Jubilaciones de la provincia se pone al servicio de los acuerdos políticos y de las necesidades de los funcionarios, en este caso de Cañete, y deja a la deriva a los miles de trabajadores entrerrianos que cumplen con la edad y los requisitos y no pueden acceder al sistema por la reforma encubierta de Bordet.
Por la reforma previsional encubierta de Bordet, los gremios recurrieron a la Justicia